Sangrienta gresca en estadio de Independiente deja heridos y 90 detenidos
Las autoridades de la Conmebol determinaron que el partido no se reanudara tras la golpiza que le propinaron aficionados del Rojo a aficionados chilenos
Por Rodrigo Sánchez
El duelo de octavos de final de la Copa Sudamericana entre Independiente y Universidad de Chile terminó en un escándalo internacional: el encuentro fue suspendido por graves hechos de violencia en las tribunas del Estadio Libertadores de América, que dejaron al menos diez heridos y 90 detenidos, según reportó la agencia AFP.
El partido, que estaba igualado 1-1 en el minuto 48, fue detenido por el árbitro uruguayo Gustavo Tejera ante la brutal pelea entre hinchas de ambos equipos. La serie favorecía a los chilenos por 2-1.
De acuerdo con la agencia EFE, los disturbios comenzaron desde el final del primer tiempo, cuando aficionados de la U, ubicados en la Tribuna Bochini Alta, lanzaron butacas y trozos de concreto hacia los seguidores locales. Luego se sumaron palos, baldones, piezas de mampostería e incluso inodoros completos.
La situación escaló cuando, tras varios minutos de inacción policial, los visitantes fueron retirados de la grada, pero cerca de 30 permanecían en el lugar y fueron embestidos por hinchas de Independiente, desatando una golpiza masiva. Videos difundidos en redes muestran a un aficionado tendido en las gradas y a otro que se lanzó desde la parte alta del estadio, sin que hasta ahora se conozca su estado de salud.
Medios como TYC Sports criticaron la pasividad de los elementos de seguridad, que no intervinieron ni para frenar la lluvia de proyectiles ni cuando los locales invadieron la tribuna visitante.
Presidente Boric condena la violencia
La Conmebol emitió un comunicado confirmando que la suspensión se debió a la falta de garantías de seguridad por parte de Independiente y de las autoridades locales.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, también se pronunció:
“Lo sucedido en Avellaneda entre las hinchadas de Independiente y Universidad de Chile está mal en demasiados sentidos, desde la violencia en las barras hasta la evidente irresponsabilidad en la organización”.
Y agregó con firmeza:
“La justicia deberá determinar los responsables”.
