La Corte Suprema de Justicia de Perú condenó este jueves al expresidente Pedro Castillo a 11 años, 5 meses y 15 días de prisión por el delito de conspiración para la rebelión, tras intentar un golpe de estado el 7 de diciembre de 2022.
A finales de 2022, Castillo anunció por televisión la disolución del Congreso, la intervención del Poder Judicial y gobernar mediante decretos. Su decisión se vio motivada tras conocer que el Parlamento abriría un debate para destituirlo tras darse a conocer una serie de denuncias que lo señalan a él y su círculo cercano de corrupción.
El tribunal absolvió a Castillo de los delitos de abuso de autoridad y grave perturbación del orden público al considerar que su anuncio no constituyó en la difusión de información falsa o inexistente.
Durante la sesión también fue impuesto el pago de una indemnización de 12 millones de soles (3,5 millones de dólares) en forma solidaria con sus coacusados. En la misma audiencia también se informó que la ex primera ministra Betssy Chávez, considerada coautora del intento de golpe y actualmente asilada en la embajada peruana en México, recibió la misma pena de prisión.
La sentencia contra Castillo también incluye la imposibilidad para ejercer cualquier función pública en un plazo de dos años.
Cabe recordar que el fallido golpe de Estado desencadenó protestas masivas en varias regiones del país, especialmente en zonas rurales, dejando decenas de muertos.
