Once años de lujo sin pagar: Sonata Towers acumula deuda millonaria en Lomas de Angelópolis

El lujoso complejo de Angelópolis arrastra una deuda millonaria por cuotas no pagadas desde hace más de una década, mientras los vecinos exigen respuestas y exhiben la morosidad con una manta monumental.
Por Agustín Pérez García
Lomas de Angelópolis volvió a ser tendencia, pero no por sus cafeterías ni su arquitectura moderna, sino por una manta que colgaron en plena vía principal de la zona más exclusiva de Puebla.
En ella, los vecinos de Lomas II acusan a los propietarios de Sonata Towers, uno de los edificios más lujosos de la zona, de no pagar el mantenimiento desde hace 11 años, acumulando una deuda que rebasa los 4 millones 55 mil 956 pesos con 76 centavos.
El mensaje fue tan directo como irónico:
“Sonata Towers no paga mantenimiento desde hace 11 años. Adeuda $4,055,956.76 a Lomas de Angelópolis II”.
Con eso, la comunidad de vecinos decidió exponer públicamente lo que describen como una “deuda histórica” que el desarrollo ha arrastrado sin que nadie la resuelva.
El “Ron Damón” de Angelópolis
El mote no tardó en surgir: los vecinos lo llamaron el “Ron Damón” de Lomas de Angelópolis, haciendo alusión al personaje que nunca paga la renta en El Chavo del 8.
Detrás del lujoso proyecto se encontraría el empresario Rodolfo “Fito” Hernández Martínez, conocido en el sector inmobiliario poblano por su participación en desarrollos como Blue Icon y Sonata Residences.
Fuentes dentro del régimen de condóminos señalan que la deuda no solo es económica, sino también administrativa: once años de omisiones que comprometen los fondos comunes de limpieza, seguridad y mantenimiento general del fraccionamiento.
El lujo que no paga
Sonata Towers es un edificio de alta gama, con departamentos que superan los 5 millones de pesos por unidad.
Entre sus amenidades destacan albercas climatizadas, gimnasio, cine privado, áreas de coworking y un lobby estilo boutique.
Sin embargo, lo que brilla por su ausencia —según los denunciantes— es la disposición para cubrir las cuotas básicas que mantienen viva la infraestructura de Lomas.
Vecinos señalan que la administración de Lomas de Angelópolis II ha enviado múltiples notificaciones y citatorios desde 2014, pero nunca hubo respuesta ni pago completo.
El monto, que en su momento rondaba los 300 mil pesos anuales, se habría ido acumulando hasta rebasar los 4 millones con intereses y recargos incluidos.
De la queja al escarnio público
La colocación de la manta frente al complejo no fue un acto improvisado.
Fuentes vecinales aseguran que la medida se tomó después de una década de gestiones infructuosas, en la que ni la administración del edificio ni sus representantes legales ofrecieron una solución.
El mensaje, visible para cualquiera que transite por el circuito Sonata, busca “presionar moralmente” al propietario y visibilizar una práctica que —según los vecinos— se ha normalizado en varios complejos de la zona: vender lujo, pero evadir responsabilidades.
Deuda, nombre y omisiones
De acuerdo con documentos filtrados y citados por medios locales, la deuda exacta asciende a $4,055,956.76 MXN, cantidad equivalente a:
• 11 años de cuotas de mantenimiento,
• intereses moratorios,
• penalizaciones por incumplimiento.
El adeudo recae sobre los propietarios originales de Sonata Towers, presuntamente vinculados a la firma Blue Icon Developers, aunque ni la empresa ni el propio Hernández Martínez han emitido postura pública al respecto.
No es la primera polémica
El complejo ya había sido noticia en años anteriores.
En 2022, una balacera en sus inmediaciones puso en alerta a los residentes del distrito Sonata.
Además, los registros de desarrollos en la zona muestran conflictos previos entre constructores, administraciones y fraccionamientos por cuotas impagas y conflictos de régimen condominial, lo que sugiere un patrón de tensiones recurrentes en este tipo de proyectos de alto perfil.
Voces del vecindario
Vecinos entrevistados por medios locales aseguran que la deuda afecta la operación general del fraccionamiento:
“Nosotros sí pagamos puntualmente, pero hay edificios que no aportan ni un peso al mantenimiento. Eso se traduce en menos recursos para seguridad, jardinería y alumbrado”, señaló un residente de Lomas II.
Otro comentó:
“Sonata Towers presume lujo, pero si no cumple con las reglas comunes, todos terminamos pagando por ellos.”
Un lujo con deuda
Mientras el desarrollo continúa operando, la sombra de la deuda sigue creciendo.
El caso de Sonata Towers refleja una realidad incómoda: en los fraccionamientos de lujo también hay morosos, y la fachada de exclusividad no siempre va de la mano con la responsabilidad financiera.
Por ahora, la manta sigue ondeando en el corazón de Angelópolis como símbolo de hartazgo y de un reclamo vecinal que ya se volvió viral.
En pocas palabras:
Mucho mármol, mucho vidrio… pero cero pagos.